Hoy a las 14 en la Defensoría General de la Nación, en
un auditorio repleto de gente (y también algunos judiciales), juró Paola Bigliani por la patria y por su honor al
asumir su cargo de defensora pública ante los tribunales orales federales.
Antes del juramento, la Defensora General Stella Maris Martínez habló de Paola y de los deberes
del defensor público. Acto seguido le recibió el juramento.
No sé si es porque me estoy poniendo viejo o qué, pero
me emocioné. Paola estaba feliz, y la cantidad de presentes muestran lo querida que ella es.
Fue JTP de nuestros cursos varios años. Nos tenía
cortitos a todos, cuando se fue tuve que designar a dos hombres para que hagan
su tarea, pero no les salía tan bien. Cómo extraño cuando me retaba delante de
todo el curso; yo agachaba la cabeza y me limitaba a un tímido “Sí, Paola”.
Inteligentísima, divertida, responsable y, como si eso
fuera poco, muy bonita. Nosotros, en el curso, la seguimos extrañando. Si los dos o tres tarados que hace algunos
años, cuando buscaban un abogado joven, rechazaron mi consejo porque Paola era
mujer, la vieran trabajando, se cortan las bolas. ¡Y se lo merecen!
3 comentarios:
Felicitaciones¡¡¡¡
suscribo a todo! Y agrego un dato de color: en el acto hubo un abogado escapista... estaba y de golpe no estuvo más (se habrá ido a escribir en un blog?)
Felicitaciones!!! Buena gente!!!
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